Rogelio Sosa Pulido
Por la mañana de este domingo 19 de mayo de 2024 la derecha mexicana se manifestó en diversas plazas del país y realizó su acto principal en el Zócalo de la Ciudad de México bajo las banderas del PRIAN y algunas todavía del PRD. Tomaron la palabra Santiago Taboada y Xóchitl Gálvez, sus candidatos para la Ciudad México y la Presidencia respectivamente.
A las arengas y promesas de Taboada para la Ciudad de México, continuó Xóchitl siguiendo el apunte que le dieron los tinterillos de la derecha, por eso no es difícil identificar ese discurso con la fachada social con la que nació el PAN en 1939 para combatir al General Lázaro Cárdenas del Río y su obra.
Ahora, sin pudor alguno la oradora habló de la patria y del servicio público para la gente. Servir y no servirse, dijo y se sirvió con la cuchara grande invocando los grandes valores de la vida, la verdad y la libertad y de salvar la democracia (sic).
Inevitablemente hay que preguntar: ¿La vida? ¿cómo? si la muerte y la violencia fueron por décadas el sello del PRI Gobierno y se profundizaron en los seis sexenios en los que se alternaron con el PAN.
¿La verdad?, ¿cómo? si no hay ningún gobierno de la derecha que no haya practicado la mentira comprando prácticamente a todos los medios y periodistas, haciendo una farsa anual el día de la libertad de prensa al tiempo que silenciaban las atrocidades y atracos cometidos desde el poder contra el pueblo a lo largo y ancho del país.
¿La libertad? ¿cómo? ¿cuál libertad para las mayorías que han vivido desde la Revolución en la pobreza, la pobreza extrema y la represión contra l@s disidentes?.
Por cierto, hoy, con la 4T la derecha tiene la libertad hasta de insultar al Presidente de la República.
¡Ah, pero, nada dijeron Xóchitl y Taboada sobre la más escandalosa corrupción con la que destrozaron al país.
Por la noche de este 19 de mayo en el Tercer Debate por la Presidencia de México, se repitió el deprimente espectáculo de una Xóchitl provocadora, mentirosa y vulgar intentando descarrilar las exposiciones de Claudia Sheinbaum y un Maynez habilitado como el crítico que nada tiene que perder ostentándose como el salvador de este país.
En resumen, ni Xóchitl ni Maynez pueden avalar sus dichos con sus hechos políticos por lo que lo que dijeron en éste y en los anteriores debates son palabras al viento y en el caso de la candidata prianista, dijo mucha basura que la pinta de cuerpo entero a ella y a sus patrocinadores.
En cuanto a Claudia, tod@s pudimos constatar que el proyecto de nación que presentó tiene un ayer, un hoy y un mañana, sin demagogia, sin aspavientos y sin promesas; sí con los compromisos para el futuro inmediato y de largo plazo que México necesita para continuar transformándose con metas reales de progreso con justicia que AMLO encabezó con la insurgencia popular del 2018.
Por cierto, la Candidata de la Coalición Sigamos Haciendo Historia en este tercer debate se vio más relajada, segura de sí misma y contundente en sus posicionamientos y respuestas haciendo un llamado final al Pueblo a acompañarla en el cierre de campaña a realizarse en el Zócalo de la Ciudad de México el próximo viernes 29 de mayo.
Consumatum est para la oposición.
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