Por José Guadalupe Bermúdez Olivares
Althusser sustentó que la ideología es un sistema de ideas, de representaciones, que domina el espíritu de un hombre o de un grupo social, en este tenor, la ideología del priismo está en fuerte crisis y en peligro de sucumbir, la luz del día está llegando y la larga noche está terminando, en el claro ejemplo de gobernabilidad. En el Estado de México, Delfina tiene el apoyo de Andrés Manuel López Obrador y el respaldo de Claudia Sheunbaum, quien ha marcado la diferencia de gobernar al estar en las colindancias territoriales.
Hace algunos años, cerca de 44, pude leer el libro Debe amanecer, de Juan Sánchez Andraka, maestro guerrerense, quien retrató fielmente la realidad que se vivía en pleno poderío del PRI, obra que, al reflexionarla y volver a pasar por algunas de sus líneas, le encuentras sentido a la crisis de la ideología del PRI construida para tener el control social y al país de pobreza que ellos imaginaron, solo de esa manera podrían haber saqueado las riquezas de la nación. El autor analiza el comportamiento humano desde la sociología como estrategia teórica donde expone los significados de la vida y del poder.
Para el control social se creó un enorme aparato, la adecuación de las leyes, la formación de los jueces, políticas públicas, control de la iglesia, entre tantos armatostes dirigidos a un fin; la escuela de cuadros en sus diferentes niveles preparaba a los dirigentes del partido pero también a los que estarían en tareas de gobierno, no eran los mismos contenidos programáticos para los que harían leyes, como para los que dominarían grupos de jóvenes o para quienes serían líderes territoriales, a cada quien su dosis para mantener el control social. Estaba implícita una forma de entender el mundo y el hombre, se creía que los millones de pobres eran necesarios para mantenerse en el poder y además aplaudieran a sus propios verdugos.
En Debe amanecer se ilustra el cómo una comunidad se arma para defenderse a sí misma, lo que hoy conocemos como “autodefensas”, redactada en 1975, describía la corrupción y el poder corrupto, la intolerancia, el machismo, la discriminación y sobre todo la pobreza que se cultivaba, como en una maceta, para mantenerla vida y actuante a favor de sus propios verdugos. Esta realidad descrita se vive en menor escala en el México de hoy, donde la Revolución de las conciencias, como estrategia política de la Cuarta transformación, busca el despertar de las conciencias para ser y para plantearse un mundo mejor.
El Estado de México es una arena política donde se debate uno de los últimos bastiones del priismo, hoy compactado con quien supuestamente era su contraparte en años anteriores, pero que, sin embargo, evidencian que siempre estuvieron en sintonía, como los describe Sánchez Andraka. Está en movimiento, a todo lo que da, una experimentada maquinaria electoral que emana del propio gobierno priista y sus órganos creados para el control social por ellos mismos: el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), los tribunales electorales y la mayoría de los medios de comunicación, dispuestos a enfrentarse a quien pretende el poder que consideran les corresponde. Que no nos sorprenda que en breve lleven a artistas y personajes de televisión o hasta a cierto jerarca religioso, es decir, que utilicen a todas sus huestes creadas con ese fin, o que Claudio X de repente se vuelva un santo de la divina caridad y abra sus grandes negocios para “regalar” migajas a los más pobres que ellos mismos crearon.
Debe amanecer, en sus diferentes nudos literarios, lleva al lector a tomar conciencia de que la noche no puede ser para siempre, que la luz puede aparecer en cualquier momento, solo esperemos que no suceda lo mismo que nos relata Platón en La caverna, donde los prisioneros, acostumbrados a la oscuridad veían sombras y se imaginaban demonios que estaban al acecho junto a la luz, negándose a salir por el temor de que se los comieran, o como el pajarillo que encerrado por siempre en la jaula, le dio miedo salir cuando le abrieron las puertas.
La larga noche está terminando, Delfina encabeza el Movimiento de Regeneración Nacional y amenaza el control casi centenario de una dinastía política que creó el control social de todos estos años, ejerció la corrupción y alimentó cada uno de los fenómenos sociales que hacen daño a la humanidad, esos que consideran que los pobres son sólo votantes que les sirven en las elecciones o consumidores. La ideología descrita por Althusser, donde las representaciones que dominan a los hombres y grupos sociales, esa que engendró el priismo para mantenerse en el poder en el Estado de México, está a punto de ser derrotada por la conciencia social de los mexiquenses.
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