Por Rogelio Sosa Pulido

Sí, pero, a diferencia de las mayorías que respaldan a AMLO y a la Cuarta Transformación para tod@s con la consigna de “¡por el bien de todos, primero los pobres!”, ellos, los fascistas, llenan plazas -cuando pueden- para defender el sistema podrido que les dio vida y riqueza por décadas a costa de los pobres y de las mayorías.
Que nadie se sorprenda: el fascismo se mueve con toda la gente que puede engañar con su enorme poder económico y de propaganda. Su meta es la destrucción de los otros, por eso en Alemania, Hitler, en Italia, Mussolini, en España, Franco, lanzaron la consigna de muerte a quien se les opusiera y exterminaron a millones. No negocian, destruyen. Por eso son peligrosos, sin embargo, en México, el poder del Pueblo es superior y tendrá que extender su brazo con las decenas de millones que somos, para derrotar esa amenaza que hoy nos reta desde las plazas.
Los fascistas en México están desesperados porque los salarios millonarios que reciben sus aliados: los burócratas del INE; los corruptos jueces y magistrados que se venden al mejor postor con los delincuentes y los narco gobernantes como García Luna y Calderón los han desnudado de cuerpo entero exhibiendo toda su podredumbre; por eso, los vamos a seguir derrotando en las plazas y en las urnas. Otro México está naciendo y la terrible herencia de los gobiernos priístas y panistas quedará atrás. ¡Viva México!