Por: Juan Miguel Camacho Sánchez.

Durante los años 2004 y 2005 el hoy Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador enfrentaba el proceso de desafuero. Recordamos a un joven Andrés Manuel hablando desde el senado, enumerando los diferentes integrantes detrás de la campaña que le perseguía; los grupos de poder involucrados y particularmente algunos personajes políticos. Por intentar abrir una calle para conectar un hospital… Frase que menciona la supuesta razón que provocaría la movilización de todos los poderes en su intensión por: frenar la carrera política de López Obrador y su posible participación a la candidatura presidencial. El proceso de desafuero era solo el comienzo de lo que terminaría por convertirse en lo que fue la “guerra sucia”, una campaña mediática orquestada tras bambalinas y ejecutada vorazmente por los medios de comunicación más poderosos del país.

La presentación de Sergio Villarreal Barragán alias “El Grande”, en el Juicio de Genaro García Luna. El grande, es uno de los testigos del caso que atraviesa García Luna, por su supuesta actividad y colaboración con grupos delictivos. En la declaración del citado personaje se afirmó una de las suposiciones más discutidas por los mexicanos en los últimos 20 años, una suposición que si bien, resultaba insoportable por lo grotesca que parecía, hoy, y después de 22 años de haber comenzado la carrera profesional de García Luna, podría llegar a ser confirmada. Esta suposición implica la colaboración de los gobiernos de los expresidentes Vicente Fox y de Felipe Calderón con el crimen organizado. Fox, quien formó parte de aquel equipo que echó a andar el proceso de desafuero de López Obrador y Calderón qué, por su parte, asumió el cargo como presidente de México en lo que muchos mexicanos aún suponemos fue un fraude electoral.

Dos semanas atrás, la actual Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, La Dra. Claudia Sheinbaum tuvo que aparecer en un comunicado oficial, donde explicaría lo sucedido en un desafortunado evento en una de las líneas del Metro, que cobraría la vida de una joven y dejaría más de una decena de heridos. Al día siguiente del comunicado veríamos la presencia de la Guardia Nacional en las estaciones del Metro. Nuevamente la Dra. Sheinbaum aparecería en un comunicado hablando del hallazgo de una de las cajas negras de los trenes del metro en los alrededores de las estaciones. Al atender a los medios de comunicación convencionales es inevitable encontrar reiterativamente análisis, reportajes u opiniones que señalan desatención y responsabilidad por parte del Gobierno de la Dra. Sheinbaum en los acontecimientos en el Metro. Afortunadamente sin más víctimas, han vuelto a suceder, curiosamente o por casualidad estos eventos han continuado alrededor de los días en que el esperado juicio contra García Luna finalmente comenzara. De hecho es contundente la poca o nula intención de las cadenas de comunicación más poderosas del País, de informar sobre los detalles de este caso, sino que, por el contrario, continúan ofuscadas en señalar los eventos del Metro. Aunque el juicio apenas ha comenzado, es para los mexicanos de vital importancia, atender a lo que algunos han denominado como el juicio del siglo, ya que nada menos, se podría confirmar que los expresidentes de México han estado involucrados con el crimen organizado.

Hace apenas unos años suponer alianzas entre narcos y gobernantes, o que el ejército en mando de aquellos gobiernos hubiera estado involucrado en la desaparición de estudiantes, le colocaba a uno cómo paranoico o cómo “exagerado”. ¿Es entonces una paranoia suponer que en lugar de accidentes, han habido sabotajes? En los días que corren, la Dra. Sheinbaum, ahora precandidata a la presidencia de México, parece atraer los viejos aires de “guerra sucia” en su contra. Resulte entonces innegable suponer que en este escenario, y con base a las suposiciones que se han ido confirmando, la Dra. Sheinbaum represente lo que en sus días López Obrador representó como precandidato. Resulte además posible confirmar, que si los anteriores gobernantes y grupos de poder hicieron todo lo posible por frenar a López Obrador, harán ahora, todo lo inimaginable por detener a la Dra. Sheinbaum en su innegable carrera presidencial.